Sam no la tocó primero
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Una obra artística está compuesta de pequeños detalles. Todos juntos elevan el trabajo del autor a la categoría que su creación merece. Pero, si vamos desgranando esos pequeños pormenores así, de uno en uno, podemos llegar a la conclusión de que también los fragmentos destellan por sí solos, o al menos a nosotros nos parece que brillan con luz propia fuera de la obra monumental.
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Cuando nos referimos a la película Casablanca, dirigida por Michael Curtiz en 1942, no podemos olvidar escenas, frases, personajes y, sobre todo, una canción: la famosa As Time Goes By. Pero hay que decir que Sam, el actor Dooley Wilson, no fue el primero en dar a conocer a la audiencia los acordes de la famosa melodía. Y a punto estuvo la canción de quedarse fuera de la banda sonora de la emblemática película.
As Time Goes By (A medida que pasa el tiempo, en su traducción correcta al castellano) es una pieza original del músico Herman Hupfeld, quien la compuso para la comedia musical Evering Body’s Welcome (Todo el mundo es bienvenido), estrenada en Brodway en 1931. El primer intérprete de la canción fue Francis Williams, en el show original sobre un escenario del teatro neoyorkino. El éxito fue sonoro y los más famosos cantantes se apresuraron a realizar sus particulares versiones, entre ellos, Rudy Vallee.
En 1942, Michael Curtiz eligió As Time Goes By como el tema romántico que debía reconciliar a los dos protagonistas. Pensó que una canción conocida sería fácilmente identificable por el público que viera la película. No se trataba de crear un tema original para el film. A fin de cuentas sólo era una melodía para justificar el reencuentro Rick e Ilsa. Qué mejor que una versión famosa que los dos hubieran escuchado tiempo atrás y que convirtieron en “su” canción en París, cargada de sentimentalismo. Y, además, la letra parecía que se había escrito como parte del guión, pues contenía todos los elementos que se querían poner de manifiesto durante la narración de la historia. Pero, en paralelo, la banda sonora de toda la cinta le fue encargada al compositor Max Steiner, reconocido por ser el autor de la banda sonora de Lo que el viento se llevó. Al compositor no le gustaba As Time Goes By y pensó reemplazarla por otra composición suya. Pero llegó tarde. Cuando quiso cambiar el guión se encontró con una Ingrid Bergman que había cambiado su fisonomía por completo, pues después de rodar las escenas de Casablanca se había cortado el pelo, tal y como exigía su papel en el siguiente trabajo, Por quién doblan las campanas. Y ya no se pudieron volver a rodar las escenas en las que la actriz le dice a Sam eso de “Tócala otra vez”. Así pues, Steiner tuvo que basar la banda sonora alrededor de la canción y hacer los arreglos necesarios, tomado como base el tema de Hupfeld. El éxito nunca se sabe dónde está escondido.
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Consciente de la popularidad que acarreaba la película en general y la canción en particular, Rudy Vallee volvió a grabar una nueva versión en 1942, aprovechando el tirón de la pantalla. Estuvo varias semanas en el Top 10 de las emisoras de radio, lo que no había conseguido en 1931. Pero no sólo hay versiones de Vallee. A la partitura de As Time Goes By se han acercado Bing Crosby, Louis Armstrong, Frank Sinatra, Natalie Cole, Nat King Cole o Rod Stewart.
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Una curiosidad antes de terminar: Dooley Wilson era actor, cantante y músico. Su fuerte era la batería, pero de piano no tenía ni idea. ¿Cómo afrontar las escenas en las que tiene que seducir a toda la audiencia con aquellas notas que han pasado a la historia?
El director recurrió al pianista Eliot Carpenter para que tocara la canción mientras la cámara filmaba a Wilson en su papel de pianista. Para ello, colocaron un piano en diagonal en el que se sentó Carpenter para interpretar la melodía. Wilson sólo tenía que fijarse en cómo ponía las manos, cómo deslizaba los dedos por el teclado e imitar sus movimientos para que en la escena pareciera que realmente estaba tocando con toda profesionalidad. Como debe ser. O por lo menos, a nosotros así nos parece.
Gabriel Sánchez
Rudy Vallee canta As Time Goes By en 1932:
Y aquí, en Casablanca, con la versión de Dooley Wilson: